Gelzaros

NO TODAS SOMOS IGUALES ANTE EL MACHISMO ( I )

 

EN BUSCA DEL TIEMPO PODRIDO

 

«Te largaste sin decirme ni pío

y, hoy vas, y apareces tres hijos después;

¡míralos como están muertos de frío!;

no tienen ni zapatos para los pies».

 

«Pero es que ninguno de ellos es mío

y este, es muy negro, ¿pero es que no lo ves?»

 

«Podrías decirles que tú eres su tío

y que estabas muy lejos: ¡en Aranjuez! (·)

 

He añorado tus viriles tortazos

y como me arrastrabas por los suelos,

para luego perdonarme en tus brazos

y restregarme tu brusco consuelo».

 

«¡Cállate, y ponme un plato de garbanzos

o, de un salto, te agarro por el pelo!».

 

(·) Aranjuez está muy próximo a Madrid

 

 

EN BUSCA DEL TIEMPO IDEALIZADO

 

Tú, como de costumbre, no me escuchas,

porque yo no te estoy hablando de eso;

¡Tu cabeza es un pedazo de queso!

 

Para mí, las cosas que hacer son muchas.

¡No conseguirás nada si me achuchas!

Y hasta me estoy cansando de tus besos.

Estoy leyendo este libro de versos

y prefiero el arte a tus paparruchas.

Bastante tiempo pierdo en el trabajo

que solo embrutece mi pobre vida

y me transforma en un escarabajo,

como, para encima, ser tu querida

bajo el ciego deseo de un badajo.

 

¡Y mi tren tiene que hacer su partida!