Por la noche yo debajo su querer
pues quedo atontado del infinito
y tantas estrellas demasiadas por ver
yo quedo tan petit como un mosquito.
Las estrellas debieran ver mi desnudo
y comprender a este poeta su oscura soledad
pero que tal belleza a la vista pudo
sentir su recompensa total sinceridad.
Yo vago por sus caminos de adoración,
que en la noche estrellada yo bien dijera
que ellas son amigas de todo corazón,
como que jamás solo y siempre a su vera.
Y acaba este poeta su noche dada
a tal imaginación llegada mi muerte
nos veremos ya juntos la vida agrada
con mis estrellas,será mi afable suerte.