Dejaré de pensar en los amores,
regaré con pasión las amistades,
evitando unos cuantos sinsabores,
y atendiendo otras muchas prioridades.
No he vivido en un mundo de colores,
he enfrentado dolor y enfermedades
asumí valerosa mis errores,
y lidié con mentiras y maldades.
Me entregué a soledad y sus rutinas
empleé de disfraz la carcajada.
La verdad me la trajo la pandemia.
Mis pasiones morían con anemia
la tristeza habitaba solapada,
y escondí de la rosa sus espinas.
Si por fuego caminas,
sabes que la vida se vive a diario,
tratando de estirar el calendario.