Alejandro Tejero Escribano

el juego del amor humano y divino

           EL JUEGO DEL AMOR HUMANO Y DIVINO 

EL ECO DE AQUELLA VOZ…

  1. ¿Por qué vienen al recuerdo

Los días que eran felices,

Que ya están en desacuerdo

Para que yo hoy analice?

  1. 2. Libre campaba el rapaz,

Morando en pueblo natal.

¿Fue en la mente la caricia

Del halo oculto eficaz

Que indicó el mejor camino

De entregarme a lo divino?

  1. 3. Mi hogar familiar dejé

Y al seminario llegué.

Un no muy viejo edificio:

Gruesas y frías paredes,

Pasillos y dormitorios

Y clases cuadradas grandes…,

Imponía a los rapaces.

  1. 4. Ambiente de frialdad, reina

En esa triste mansión,

Que alegra con ilusión

La juventud que la habita.

  1. 5. La vida, orat et labora:

La oración, en el invierno,

El trabajo, en el verano,

Para a mi padre ayudar

Y en el campo trabajar.

        TRANCE   DEL AMOR “DIVINO

  1. 6. Con anhelo caminé,

Con esperanza busqué,

Para con Dios encontrarme

Sin saber a quién confiarme.

  1. Tan alto fue mi concepto

Sobre los temas divinos

Que los seguí cual destino,

Sin pensar en más caminos:

Haciéndome “fiel adepto”.

  1. 8. La amistad de ti invisible

No quiero lejos vivir.

Desde nacer, es morir.

Quiero vivir, si es posible,

Pudiendo amar sin morir:

Vivir deseé la ascética,

Olvidándome la  mística.

  1. Amor humano y divino

Difícil de conciliar:

La “mística” es lo divino,

“ Gracia que concede  Dios”,

Concepto ya “irracional”

Con visiones similar:

Símbolo de lo irreal

Que es el  delirio  mental.

  1. La ascética es obra de hombre

Sólo posible alcanzar

Con sacrificios enormes

Que deterioran el cuerpo

Y a la mente flaquear.

Tan sólo seguí lo ascético

En el amor terrenal.

Me falta tiempo en morir

Y cumplir lo desear.

  1. La frase “DIOS PODEROSO”

En mi pecho yo grabé

Y en mi mente reflejé,

Que me sirvió de motor

En la senda del amor.

  1. Como SUPREMO SEÑOR,

De universo creador,

Dios se me mostró evidente

Por las huellas del amor

(Y los ojos de la fe):

Su presencia fue en mi mente.

  1. “El muero porque no muero”…,

Quien la muerte deseara,

Pensando mejor que viva

En unión perfecta a Dios

Es caridad “perversiva”,

Es ególatra sincero.

Pues morir siempre elimina.

  1. Fácil fue a Cristo morir;

Lo difícil fue vivir

Para el calvario sufrir.

Fue la voluntad del Padre:

El cáliz no ha de eludir.

Si a Cristo quise imitar

Sus pasos debí seguir.

  1. Su ayuda siempre esperé,

Pues sujeto está al madero

Con tres clavos oxidados

Que en mi mente reflejé.

Mora en “sagrado joyero”

El Cristo “sacramentado”,

A quien siempre me entregué.

  1. Amé en mi vida sufrir

Para ayudar a mi hermano

A que Dios haga subir

Hasta el cielo de su mano:

Fue la entrega de servir

Al divino Dios humano.

 

                      PÉRDIDA DEL AMOR DIVINO

  1. 17. ¿Acaso el divino amor

Abrasó tan fuertemente

Mi sensible corazón

Cuando en uno se fundió,

Convertido en “leño ardiente”

Con aquel humano amor ?

  1. 18. Nunca fue la cobardía

“Ni del caballo caí”

Ni confundí la  ilusión.

Fue que la ventana abrí

De pura investigación.

El negro velo apartó,

llegando a la conclusión:

“De que todo era ficción”.

  1. 19. Las humanas religiones,

A través de sus gurús,

Exigen crueles acciones,

Privaciones implacables

Y exalta el acto execrable

Para aplacar a sus dioses.

  1. 20. De Dios, el divino amor,

Me faltó su clara voz.

¡Perdóname si no supe

guardar tu divino amor!

Mi yo ha quedado vacío,

Del alma en algún rincón.

  1. 21.Si notas que no respiro

Y que he perdido el suspiro,

Es ya que mi corazón

Guarda silencio total,

En la vida del Señor.

       (“Los muertos guardan silencio”

Como Dios en mi oración).

             FIN.