Así, pretendo hacerte entender
mis sentimientos humanos,
te hago saber a ti, linda mujer
como me tienes en tus manos;
que de verdad te diría,
y por amor tantas cosas,
tanta belleza en mis poesías
néctar dulce de mis rosas;
si tú quisieses mi amada
contigo me casaría,
como una esperanza soñada
que nunca terminaría;
reluciente eres, dulzura mía
más reluciente que el sol,
en el tiempo que te conocí sabía
que eras tu mi inspiración;
si de amor tú quisiera,
en mi cuerpo tocaría,
una melodía, que tuviera
tales encantos y cortesía.