Alexandra Quintanilla

Vi

Vi fechas, de principios y finales, y vi nombres, pero jamás vi rostros. Era imposible, ya todo se había diluido. Ya no había nada. Ni quienes una vez fueron a ponerlos a aquel sitio en donde estaban. Quizá estaban haciendo sus cosas en cualquier lugar de cualquier sitio. Ya todo estaba olvidado. Quizá en un día cualesquiera los recuerdan, pensé. Pero a unos si y a otros no. Y que tristeza sentí. No tenían al lado casas, ni carros. No los vi por dentro, solo vi el concreto coloro que los cubría, y esos adornos (no el de todos, algunos estaban añorados por el deterioro). Ahí tal vez solo habrán huesos, digo. Ya ni la ropa. ¿Qué ropa habrán tenido?, ¿De qué color habrá sido esa ropa?, ¿Qué estaban por hacer cuando se fueron?, ¿De qué forma y en qué momento se fueron?, ¿Bajo que circunstancias y cómo quedaron consigo mismos?, ¿Qué pasaba por su mente cuando lo hicieron? ¿Y qué hubiera sido de ellos si se hubieran quedado? ¿Qué fue de lo que hicieron?, ¿Que hizo el mundo con eso?, ¿Qué hicieron ellos con el mundo cuando estuvieron?, ¿Habrán dejado algo significativo? Digo, a lo mejor una planta, un niño, un libro, un cuadro o algún otro que otro sonido emitido y grabado y sentido... ¿A dónde fueron aquellas almas? (Eran muchas porque, era muchas cajoneras) ¿Dónde estaba el ser antes de que estuviera acá?, ¿En el mismo sitio de lo que viene va? ¿Qué los simplifica o los resume?, ¿A qué se dedicaban y que les apasionaba? ¿Les apasionaba algo?, ¿Qué palabra habrá para ellos en la memoria de Dios?, ¿Cual fue su verbo en el universo?, ¿Dios les llora también?
¿Qué estoy haciendo yo ahora cuando veo y pienso en todo eso?, ¿Cuando será y en donde y de que forma y bajo que circunstancias mi turno? Porque lo se, tengo una fecha de inicio 29/12/1998. Yo vi casi todas, ellos al igual que yo también la tienen, pero... ¿Qué hay de la otra?....El mundo y sus cosas. ¡Ya no quiero pensar en eso! porque nunca hay respuesta de todo ello... ¡El mundo es demasiado incierto!