Ojos que me seducen
Labios que incitan
al primer encuentro
Dos seres entregados
el mismo sentir de antaño
Donde todo empezó
Ese romanticismo acabó
cuando el futuro comenzó
Manos inertes
Dolor ferviente
de súplicas inocentes
Llorando los infantes
Besos fríos
Mirada ausente
Tenerte es martirio
en este idilio
Penumbra agonía
Ahogada mi voz
Mis hechos gritan
No hay sentido
ni coherencia
Pero si dos huellas
Creciendo
Amor de un sentir
un hechizo eterno
Vos de cálido sentimiento
Si será travesía de este amor
Mirada profunda
Besos eternos
De este amor que deseo