Hieres a mi Corazón
Sólo es un tiempo,
como en el cuerpo,
y en el ocaso un frío,
si hieres a mi corazón,
y con total razón,
se convierte mi piel en deseos,
vivos dentro de mi piel,
es como poseer el delirio,
y es tan nefasto el frío,
que es verdad,
porque si hieres a mi corazón,
es como perecer en el desierto…