El hombre perdió el paraiso por causa de una mansana,
desde entonces heredamos la temtación por lo prohibido,
lo seguro no tiene misterio,
las leyes de Dios están escritas en nuestros corazones
No obstante:
Fornicamos
adulteramos
envidiamos al hermano
mentimos
engañamos
Vivimos esclavos del tiempo
que lo inventó el hombre no Dios,
El paraiso no está perdido, lo guardó Dios del hombre.