Hay una fosa escarbada
por la garra de la fiera,
hay voces calladas
siempre por la misma tierra,
removida y olvidada
por la mano que siembra
de muerte la esperanza
de un pueblo que se niega
a la cadena de la dictadura
y a la bala que les someta
a ser gota esclava
de su devastadora tormenta.
Que tiemblen todas las fosas
llenas de sangre libertaria,
llenas de raices ansiosas
por retoñar en la memoria
de todas las madres orgullosas
de los hijos de una patria
que sepultaron bajo losas
los verdugos de la historia.
No , no fuimos soldados
ni hacedores de tinieblas,
éramos hermanos
defendiendo sus ideas
contra gobiernos gobernados
por violadores de conciencias,
contra carceleros que condenaron
a las cárceles de sus miserias
a guerreros descalzos
de poderes y riquezas.
Que llegue a las masas
nuestro grito revolucionario
y el aire libre de las alas
de cada corazón libertario
de la pluma firme de cada alma
que cubría en los sudarios
cada libertad enterrada
olvidada en los calendarios
pero nunca exterminada.