Ben-.

Surreal-.

Yo bajo al mundo surreal

dominan viejos con su copa equidistante

su sombrilla aterciopelada esa navaja fulminante

del que escribió su risa sobre dorados muros.

Y elefantes me oprimen, su ternura de diablo,

su supresión definitiva, la largura de un mundo

que cabe en una ridícula tienda de campaña.

Me aprietan los zapatos sus chinas

sus acometidas basculantes

sus razones advertidas y sus oscuros

tazones de risa y lluvia. Me aprisionan

los candeleros de la calle, inadvertidas

trampas, avenidas o solitarios mapas.

Cómo sabré en qué mundo vivo.

Duermo junto al palo de la escoba subversiva.