El día azul
anima al caminante
en el paseo.
Invitación
que acepta y que agradece
gustosamente.
Abre los ojos
y mira al horizonte
buscando el cielo.
El día claro,
el cielo azul celeste
y alguna nube.
Cuadro perfecto,
tarjeta de visita
y de emoción.
Surgen sonrisas
de labios temblorosos
y entusiasmados.
Bonito el día
de invierno, que se marcha,
cual despedida.
Será el preludio
de días ya cercanos
de primavera.
Quizás, el día,
te invita, en la jornada
a que la vivas.
Rafael, Sánchez Ortega ©
07/03/22