Aquí estamos en la rambla
mirando el inmenso mar,
preguntándonos si algún día
lo podremos atravesar.
Con la vista en el horizonte
juntos y abrazados,
una brisa que mueve las olas
sintiéndonos tan enamorados.
El océano es tan grandioso
no tiene ninguna comparación,
y la belleza de sus aguas
tan bellas como nuestra pasión.
Que misterios habrá en el fondo
que aventuras en el ancho mar,
que haríamos nosotros ahí
si solo nos sabemos amar.
Un barco se ve a lo lejos
apareciendo y desapareciendo,
como si fuera un vigilante
que cuida que estamos haciendo.
Con tu cabeza en mi hombro
frente al mar vimos el amanecer,
una de las maravillas del mundo
que juntos vinimos a ver.
Como una pintura irreal
creada por el pincel de la naturaleza,
usando los colores de la vida
para darle al mar su belleza.
El sol sale de pronto
y la pintura del amanecer desaparece,
hasta que mañana nazca otro día
y por un momento esta magia regrese.
Nosotros también nos vamos
de la mano a otro lugar,
donde el mar esconde su magia
donde tú y yo nos podamos amar.