Nuestras almas se desean, se fascinan,
El amor con sus luces nos iluminan,
En besos románticos se desfallecen,
Una a la otra aman, se apetecen.
Abrazados nuestros cuerpos se estremecen,
Entre nuestro amor lleno de miel desfallecen,
En un idilio hermoso y tierno se entregan y enloquecen,
Se derriten, se contemplan, se aman, el amor las adormece.
Juntas y abrazadas amorosas sueñan,
Entre abrazos y caricias románticas los días se pasan,
Con todas sus fuerzas y con sus deseos se aman,
Juntas para vivir nuestro idilio todas las noches se desvelan.
Al tiempo tratamos con gran indiferencia,
Solo me interesa llenarme con tu deliciosa esencia,
Todo queda entre nuestra alcoba, en nuestra confidencia,
En nuestro idilio que navega por las calles de Venecia.
Un amor transparente que en ésta noche se ha cristalizado,
Entre tus brazos tiernamente me tienes acostado,
Mientras pruebo el sabor delicioso de tus labios,
De tu amor y tu cariño queda mi corazón bañado.
“Que te amo y te quiero todos los días te lo digo, nuestro amor cada minuto cree y se hace infinito, mientras beso tu boquita despacito, es un idilio eterno así está descrito.”