Y ahora te encuentro
en el lugar menos esperado,
donde creí que los espinos crecían
allí pasó tan rápido tu silueta
que me quedé encantado
y pregunté cual era tu nombre.
Hace tiempo sin ver la primavera,
ahora veo alondras que posan,
al lado de muchas mariposas,
y allí te vi pasar...
yo sabía que eras para mí,
aunque nunca habíamos hablado.
Hace tiempo que perdí la esperanza,
creyendo que mi mundo aburrido,
era el único lugar...
hasta que te vi hablar,
entre la oscuridad y la luz
yo reía soñando que un día
mis oídos te escucharan
susurrando mi nombre,
con una voz tan dulce,
como el azúcar de tus labios
que hoy me hace soñar despierto.
Alex Gramt