YO EL INMIGRANTE
Me siento extraño en mi propia tierra
Recuso hasta las letras que la nombran
A veces ignoro sus roces y sus aromas
Como si te hubiese perdido Venezuela
En las lágrimas de quienes hoy te añoran
No sé dónde realmente te encuentras
Ni donde buscar lamentos que te lloran
He perdido, hasta el origen de mi sombra
Y el dulce sabor de tus horas tempranas
Que se quedaron represadas en alforjas
Y en los tormentoso caminos de historias
Que en otros mundos, con razón imploran
Los bellos momentos que fueron tu Gloria
Ignoro hasta mi propio nombre, y la esencia
Del color que en mis sueños te nombran
Ni siquiera se dé las sombras ni su existencia
Tan solo de los recuerdo que nunca sobran
Y mis anhelos que insistentemente te nombra
Como si fueras el amor que mi alma te norma
Y mi corazón adorna el quehacer que no adornas
La decisión que no quiero en tu débil formas
Hoy me siento, con la tristeza del vacío nido
Añorando el canto del ave que se ha perdido