Mientras llueve,
agradezco tus miradas
cargadas de empeño porque nos miremos.
Mis ojos aturdidos de gotas plateadas
confundidas con las lágrimas.
Mientras llueve,
me estremezco
si miro tus pestañas
como pequeños alfileres de plata
Y vuelve la lluvia
torpe y sucia,
sin música ni magia
calles desoladas
de tobillos húmedos.
Mientras llueve
me detesto
necesito tu abrazo de heno
olor y viento
Mientras llueve,
eternamente,
el agua corre rauda por los desagües
abrazandose al tiempo
mojando los tobillos despistados.
Mientras llueve,
afloran mis almas
la ventura y el sufrimiento
la dicha momentánea y el mar del tormento.
Vuelve a llover,
y desde entonces,
los días de tristeza
amenazan furtivos.
Mientras llueve,
y saltaba sobre los charcos que dulce éxtasis invadía mis párpados.