Por muy precavidos que seamos
nunca será una buena garantía,
porque la vida con sus contrastes
siempre nos sorprendería.
Nosotros hemos cambiado tanto
que se ve como algo muy normal,
que salgamos de una gran fiesta
para asistir a un velorio o funeral.
El blanco desprecia al negro
con una actitud muy humillante
y no ha sido posible acabar
con ese horrible contraste.
La imposición de ricos contra pobres
es una lucha que nunca se acabará,
porque cuando un pobre surge
el rico de ninguna forma lo soportará.
La justicia es para el pobre
y para el que es desposeído,
porque un rico nunca pagará
un delito que haya cometido
El hombre con su poder
se cree dueño de la vida
y siempre ha querido tener
a la mujer por el sometida.
Debemos estar siempre alertas
con una actitud bien precavida,
para poder enfrentar con éxito
los contrastes de la vida.
Autor: Alejandro Díaz Quero
Villa de Cura,21/03/2022.