Duele mucho el corazón
al perder lo que ha querido
cuando al corazón herido
lo ha punzado un aguijón.
Y si el alma en ascensión
ha callado su latido
duele mucho el corazón
al perder lo que ha querido.
Y el duelo causa aflicción
en un corazón sufrido
cuando una madre ha partido
y se va sin regresión...
¡Duele mucho el corazón!