No todas las palabras
son lo que se espera.
Mas, algunas aunque duelan...
Impulsan.
Ésta mañana exactamente
24 palabras me dolieron muy profundamente.
Porque, son una cruda verdad.
Y aunque antes de leerlas,
ya había tenido una charla conmigo misma
que derivo en lágrimas...
No había sido suficiente,
para hacerme ver.
Mi alma gritaba callada,
oraba por ayuda,
oraba porque cuando no hay
a quien contarle... Eso alivia.
La realidad te golpea,
te va a golpear...
Por más que quieras esquivarla.
Es así.
Por eso, después de leerlas...
Me dije: ¿Y qué harás?
¿Tan solo seguir escribiendo?
¿Orando cuando te sientas mal?
Ah, porque cuando estás bien...
Te olvidas de Dios.
¿Vas a seguir buscando que suceda
un milagro?
¿Vas a seguir sonriendo si sabes que
tienes el corazón destrozado
Cuando...
Te debes tanto y no te has pagado,
sino que la deuda sigue aumentando?
Sí, son tantas preguntas
que había bloqueado,
por vivir, según yo viviendo.
La verdad es que,
a nadie le importa.
Todos llevan también sus penas
y no debo esperar que alguien
se voltee de pronto a ver que estoy mal
y todo me resuelva...
Porque no es así.
No va a ser así.
Estoy sola. Vine sola y me iré sola de aquí.
Y debo asumir y vivir con ello
y no a través de otros.
Sé que Dios me ama,
que algunas personas
que son contadas también.
Pero ellas algún día se irán,
como se han ido otras.
Debo salir ya de la jaula
que está abierta y que yo he preferido ignorar.
Debo salir de la cama porque no estoy atada, basta que salga de las sábanas y me levante de ella.
Debo hacer por mí lo que nadie hará..
Ni siquiera Dios,
porque él nos dio libertad.
Y yo, me he esclavizado a mí misma.
Las palabras...
han sido hoy la semilla,
y yo, soy la tierra
y mi llanto ha sido el agua.
Ahora, debo cuidar...
Debo cultivar mis flores.
Me lo debo.
Porque suelo cosechar para otros
lo que no les cuesta
y servirles a la mesa
cuando están hambrientos
y cuando yo he tenido hambre
nadie me da ni migajas,
y cuando quiero oler las rosas
nadie me las trae...
Solo hallo desiertos purpuras, sin rosales,
sin agua y sin pan.
Y no, no se qué pasará.
Sólo sé que quiero recuperarme,
y que no quiero hacer de lado
los te amo
que me dice mi mente
y mi corazón...
Porque al final, son los más sinceros
y los que siempre están.
By Diana Janeth Reyes Diáz.
(Diana Reydz)
Publicado el 25/03/22
10:17pm
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