Habían más hipócritas de los que mis dedos podían llegar a contar, mire a mi alrededor, quizá yo también lo era para ellos, quizás ellos tenían su propia vida y no solo eran personajes secundarios en la mía.
Quizá suene narcisista porque algún día me hicieron sentir un personaje secundario en mi vida, quizá fue mi única opción.
O quizá fue la única que ví.