Amelia Suârez Oquendo

TU VOZ

Tu voz, cálida, inesperada,

repica  en su propia  razón.

¡Ella es música celebrada!

¡Ella  me acaricia el corazón!

 

Hoy tu voz, suave, anunciada,

vino a regalarme una canción.

Cantó como  una flor agraciada.

Yo le di un jardín de devoción.

 

Tu voz, dulce, nunca retirada,

entró radiante en mi mirada.

Sentí una sublime sensación.

 

Es una historia recordada.

Abrazo tu voz, enamorada.

Voz del ayer. ¡Tierna emoción!

 

Amelia Suárez Oquendo