Esta fría la mañana y mis lagrimas se han convertido en mi abrigo. Los árboles perdieron sus hojas para poder renacer como perdí la esperanza de volver a querer. El derribe de mis pensamientos encima de mis sentimientos que destruyen mi enlucimiento. Las tardes grises convertida en noches obscura me recuerdan a esos momentos de locura. La nieve fría como el beso que me diste cuando me sorprendiste. La brisa del otoño que desliza cambios como el perfume de tu alma que me hechiza y me penetra a diario.
Deseando la primavera para que nazca mis deseos de otra etapa, la que florece la flor mas deseada por tus encantos que derivan mis tinieblas .