Ella era común y corriente,
De esas que pasan desapercibidas,
Ella era de cuerpo presente
Repeliendo una mirada encendida.
Una más
De esas que llaman \"promedio\",
De esas que en bares y fiestas
No son víctimas de asedio.
Ella era de esas
Que no son fuentes de alegorías
Ni con bombones ni con fresas
Ni con estrellas en noche fría.
Ni muy muy ni tan tan,
Enemiga de los suspiros,
Cuerpo sin sangre para vampiros
Que solo van a lo que van.
Pero un día llegaron mis ojos
Y esa chica corriente,
Una más entre la gente,
Fue algo más que labios rojos.
Fue más que rostro ordinario,
Que un cuerpo del montón,
Más que una cuenta del rosario,
Más que algo en un rincón.
Solo había que mirar bien
Y con los ojos del alma
Y así ver pasar el tren
Enterito y con calma.
Ojalá exista un remedio
Para una manera de observar
En la que el físico es primordial
Para decir que una chica es promedio.