No sabía que extrañaba escucharte.
No sabía que mirarte era más que sólo verte.
No sabía que tu sonrisa es capaz de crear universos paralelos.
No sabía que cada gesto tuyo elimina el tiempo.
No sabía que es tan importante saber que estás.
No sabía que extrañaba estar a tu lado, solamente porque estás ahí.
Incluso no sabía que simplemente pensar en ti era suficiente para provocarme escribir estas letras, que no sabía que podía escribir.