De joven de mi brotó
Una planta bien hermosa
Con buenas aguas regaba
Su tallo y sus lindas hojas
Con el tiempo germinó
Convirtiéndose en bella rosa
Muy feliz la contemplaba
De ella estaba orgullosa
Un buen día se marchó
Pues la vida la incitaba
Con los brazos muy abiertos
Mil vivencias la esperaban
Hoy es toda una mujer
El fruto de mis entrañas
Y aunque siempre deseé su bien
Ya solo la riego con lágrimas