III-.
El vientre acumula su perversión dilatada
miembro oscuro del alma, su insólita evasión.
Efusión de caracteres, renace primavera
en el medio de los arcenes. Neutro y todo,
cual ulular del trozo de los indios nativos,
me acaparan como mano de golpe inquieto.
Yo sé de las necesidades de un cantor, de su helecho
tierno, de su complicada red de amistades.
De su canción transformada por los ríos púrpura.
Mueren en mí miles de pechos que deliran
con su súbita pasión por peces y despojos.