No me devuelvas nada, llévate todo,
que al final y al cabo, nada te vas a llevar
el día que te vayas de la faz de la tierra.
Yo con mi trabajo, puedo comprar
lo que te llevas, aunque no has hecho
nada, ni trabajaste conmigo para
que te hagas la dueña.
Lo bonito es que te vas de mii lado, y de mí corazón porque ya no te amo; muchas gracias
por tú abandono que estoy felíz,
que en casa, hasta donde dormías
conmigo no tendré recuerdo, y eso
me deja muy contento.