Cuando dices que me amas,
y no lo sientes,
cuando dices que eres fiel,
y me traicionas,
cuando te digo algo gracioso,
y no te ríes;
pero lo haces con otras personas.
Cuando te pido perdón,
y no me perdonas,
cuando te miro,
y tú me ignoras,
por eso el cielo, que tú desprecias,
se torna oscuro y por mí llora,
llora de pena y me implora,
que cual Aguila, emprenda hacia él;
en majestuoso vuelo,
donde me ensalzará;
con toda su gloria.