Sólo menciono tu nombre
en mis noches de nostalgia,
en el interior de mi alma
vives cual ramo de flores;
son tus miradas los soles
que iluminan la mañana,
tus promesas la esperanza
de que tu amor yo recobre;
y me levanto seguro
de encontrarte en la vereda,
a vestirme yo me apuro
busco tus labios de seda:
es ese cuerpo tan puro
una obsesión sempiterna...