Apaga el fuego
y evita que las chispas
quemen tus alas.
Pequeño arcángel
que cuidas a los niños
y a los poetas.
Es que hace frío,
me dices susurrando,
busco el calor.
No te impacientes
protégete en mi porche,
está caliente.
Tiene el relente
del sol y de la estufa
y es agradable.
Ahora descansa,
recobra tus sentidos
y fortaleza.
Seca tus alas
mojadas por la lluvia
y el temporal.
Luego prosigue
tu viaje por el mundo
llevando paz.
La necesitan
los niños y mayores
que a ti te esperan.
\"...Apaga el fuego,
de odios y de guerras,
pequeño arcángel...\"
Rafael Sánchez Ortega ©
06/04/22