ESTE SILENCIO
Hola
nardo rojo,
el brillo de tus ojos
me dice que estás feliz,
disfrutando la briza mañanera.
Hoy vengo a hablarte nardo, de
esa herida en el alma que no sana;
porque falsos líderes del mundo, aun
siguen fabricando armas para violentar
con guerras, el gorjeo sagrado de las
astromelias moradas; porque hay
quienes aún no han querido
hacer parte de la orquesta;
en el mundo hay quienes
aún no se han dado
cuenta que la
vida, la vida es una grandiosa fiesta.