Alberto Diago

ENTONCES... en Ucrania

Entonces...

llegaron aquellos,

aniquilando vidas y sueños,

derribando historias,

trayendo... infiernos.

 

Entonces...

las bestias sin corazón ni cerebro,

y... con máscaras humanas,

bombardearon el alma de los pueblos;

guiados por un demente, 

acorazado con ambición y podredumbre.

 

Entonces...

huyeron los infantes con sus madres, 

todos ellos con el corazón

mutilado y compungido;

dejando a su terruño... malherido,

y a los hombres tratando de llevar

a las bestias... al olvido.

 

Entonces...

todo fue incertidumbre:

¿El olvido se tragó a las bestias?

¿O las bestias llevaron

a los humanos al olvido?

 

xE.C.