Siembra
mi corazón
sentimientos bellos,
con su letra
juvenil, todo
sobre aquello.
Su fruto tan largo
que cae en el suelo,
y nace allí mismo
todo pensamiento.
Pero cuánto amor
tierno y duradero,
y como produce;
un amor verdadero.
Bendiciendo
el corazón
para llegar a viejo,
de amar tanto
de dar su consejo.
y sobre él, entonces,
pasarán otros versos,
sembrando, amor
el poema eterno.