Iluso cuerpo
que me atosiga
sin otro atributo
que sus labios enmascarados
en el beso decapitado
del ángel.
enjambre de lluvias
sobre la invisible cara del espejo,
ante la carencia de lunas llenas
que sirvan de sepulcro.
Transparencias afiladas
como puñales sumisos,
rumor desafiante
de las almas ciegas
con su azarosa pavesa
alzando la voz.