Vienes oteando el escote de mi blusa y luego haces arder el fuego bajo mi falda… Se sonroja mi rostro al saber que te vuelve loco por mi cuerpo y que en un cierre de ojos consumes mis deseos…
Y yo loca por ti, anhelo que me des vida y muerte entre tus brazos; ansío recorrer con mis yemas el camino de tu felicidad…