Antonio Martín

Pozo profundo

Fuiste mi amada

y caí en un pozo, 

con tan buena suerte

que el agua estaba fría;

era verano, calor 

del mediodía, 

escalando salí, 

sin daño alguno, 

del profundo pozo

y con tanto alboroto... 

¿Quien fue mi amada? 

Ya... ni me acuerdo.