Me obsesioné con la noche y no solo por su oscuridad, busco mil maneras para mis ojos cegar y fundirme con Morfeo en esta soledad.
A través de la penumbra con gran ansiedad busco tu rostro cómo las tantas noches que te vengo a visitar.
Hoy no es igual sé que estás más no te puedo mirar.
Estoy aterrada dime qué pasa me ahoga este sentimiento, en el fondo del mar con mil pesas sin lugar a escapar. Siento que cada vez me voy hundiendo y tu más legos de mi estás.
¡VEN A MI TE LO RUEGO!