Por los senderos
avanzan peregrinos
hacia Santiago.
Unos tras otros
desfilan lentamente
en la jornada.
Hay quien madruga
y busca, en la mañana,
ir más ligero.
Los más, en cambio,
caminan cuando pueden
o cuando quieren.
Ruta del norte
y ruta de la costa,
así las llaman.
A Cualquier hora
distingues las figuras
con sus mochilas.
Se siente envidia,
se añoran viejos tiempos,
de juventud.
Hay caminantes
de todas condiciones
en cuanto a edad.
Esto te anima,
te llena de alegría
y hace soñar.
Rafael Sánchez Ortega ©
15/04/22