Muy pocos saben que toda la neblina del presente, y toda la neblina del futuro, caben, en un simple frasco. Un gallo es un Dios que se anticipa a la bruma de la mañana, y su canto, una brújula para navegar en la incertidumbre. Muy pocos saben que a las sombras, se les pueden ensartar soles, y que la noche es un pájaro sin rostro, con las alas de luna, pero al final de cuentas un pájaro. Muy pocos lo saben, yo lo sé, pero a veces, se me olvida.