Nacho Rey

SILVIA

 

En el fondo de este mal la vida pasa,

tiene su cara en mi ventana la Verdad,

la leña en mi espalda que me abrasa

y no soportar mi naufragio con tu beldad.

 

¡Oh, mi Reina!. Tu reloj fue una ruleta

la burla de los sapos una quimera tocada

en tu hora divina triste, realidad del poeta

con sus sombras aún en juventud helada.

 

Entre las rosas cuatro veces he muerto,

por no silbar tu flor que me envolvía

de amor, se hizo herida como un desierto.

 

¡Ciego estuve!, ¡ciego fui!. Sólo letanía

a mi delirio sonoro, sólo estuve abierto

a esos cuatro dolores de mi propia felonía.

 

 

                (Abril-2.022)                NACHO REY