Pyck05

AQUELLA TARDE...

Aquella tarde
perdí una mariposa
por impaciente.

Ella volaba
ajena a mi presencia
entre las rosas.

Yo la seguía,
primero con la vista,
en sus cabriolas.

Luego, mis pasos,
corrieron detrás de ella
y se asustó.

Alzó su vuelo
cruzando la laguna
sin detenerse.

Atrás quedé,
culpable y asustado,
entre las rosas.

¿Por qué corrí,
detrás de tu figura,
para asustarte?

Solo quería
tenerte entre mis dedos
y acariciarte.

Y te perdí,
mi linda mariposa
y lo sentí.

Rafael Sánchez Ortega ©
21/04/22