El cielo en la tierra.
Hoy vislumbre a Laura
con el cabello cubriéndole la cara,
con sus botas de cuero
y su sombrero de vaquero.
Ayer contemple a Laura
con su saco de vestir
y la camisa abierta
¡Este es el cielo en la tierra!
Esa misteriosa mujer
que tiene el aspecto de un hombre,
lesbiana, extraordinaria y empoderada.
Mi verso se limita a ella
y a su ensordecedora belleza
que calma la marea
y tu desdicha se lleva.