La sonrisa es algo que he perdido en mi faz,
desde hace mucho tiempo,
se ha convertido en un cometa,
que aparece muy pocas veces en el tiempo.
Tu sonrisa radiante ilumina mi alma,
desmotiva mi tristeza,
la envia por la ramas,
dejando con certeza,
felicidad en la corteza,
de mi cara sonriente,
esa que tu dices que amas,
en cuerpo y alma.
De la cual eres su admiradora más ferviente,
de su gracia eres la fuente,
me río de todo, aunque sea insipiente,
mi sonrisa incipiente,
cuando tú apareces,
como el Sol por el oriente.