Paso del blanco al negro,
porque soy negro y también blanco,
llevo en mi paladar
el sabor de los extremos.
¿Por qué pretendes elegir
sólo el péndulo de un lado?
Soy uno y su negativo,
a lo largo de un día
una hora
un minuto
un segundo.
Voy y vengo, vengo y voy
en un círculo incesante;
el mundo pide coherencia,
mientras me tiene girando
en su absurdo remolino.
Paso del negro al blanco,
vuelve la luz del sol;
es que en esta oscilación
sea de día o sea de noche,
jamás está nublado,
y el tedio no es mi prisión.