Hay una verdad, la cual, no es una leyenda. Es un cuento que dice así… -“había una choza embrujada, que la persona que entre a la choza se convierte en lobo y cuando sale de la choza que se hallan los ojos de la cueva del horizonte, se convierte en humano, qué cosa, dentro de la choza un lobo y afuera un ser humano. Cuando, de repente, entra a la choza un niño llamado Peter, se convierte en lobo y cuando sale despavorido de los ojos de la cueva del horizonte, es un ser humano, y qué tiene ver una cosa con la otra, que es un lobo de verdad que aunque sea humano es un lobo ante los ojos de la cueva del horizonte. Y vá en busca de ayuda Peter, porque aunque es un ser humano él se siente ser como un lobo. Y un doctor le dijo que era sólo una mala emoción, sino que se sintiera como ser humano y un humano serás. Y Peter se dijo que irá, otra vez, a los ojos de la cueva del horizonte para saber de la verdad cuando entra a la choza se miró en el espejo y se vió como un lobo y cuando salió de la cueva se miró en espejo y un ser humano es. E hizo el hechizo al revés entró como sintiéĹ„dose como lobo y, sí, cambió a ser humano dentro de los ojos de la cueva del horizonte y lo que hizo fue que salió de la choza como ser humano y le agradó y quedó así…”-. Y vá el lobo a entrar a la choza y también le sucede lo mismo, pero, esta vez el lobo es un lobo y sale de la choza como el niño Peter. Y Peter se desaparece en la vida.
Moraleja: “No todo es como tiene que ser”.