Hace años pude contemplar unos ojos profundos y traviesos que al verlos reflejaban la candidez y dulzura de una niña, pasaron los años y esos ojos me engañaron con su reflejo de mujer idéntica a aquella niña que un día contemplé, estos nuevos ojos unidos con un cuerpo de silueta perfecta enmudecieron mi voz pero despertaron las miles y unas palabras que tenía para escribirle, pero a medida que pasaban los días sus ojos confundían cada vez más las frases que un día pude unir con facilidad, todo se volvió distorsionado incluso su misma mirada a tal punto de entender que no estaba frente aquellos mismos ojos, comprendí también que quizás mi deseo de volverla a ver nublo mis sentidos y con ellos en una noche como esta despertaron las únicas palabras que unidas podrían explicar lo que significó dejar ir los ojos que jamás pude entender.
Fuiste como el reflejo de aquella nube en aquel mar inmenso, fuiste como aquella noche hermosa que al pasar las horas se convirtió en amanecer, fuiste aquella luna resplandeciente que se escondió entre los arbustos de aquel bosque, fuiste la brisa que no volvió, fuiste todo menos Tu...