Mauro Jesús (mallito)

¡INOLVIDABLE MADRECITA!

¡Si supieras cuanto te extraño

si supieras la falta que me haces

talvez comprenderías

lo mucho que te amo

Pero estás tan lejos de mis ojos

donde no puedo verte

abrazarte, ni escucharte!

 

¡Dejaste un hondo vacío

cuando dejó de latir tu corazón

cuando se fue tu último aliento

lloré amargamente como un niño

al quedarme con dolor profundo 

solo y triste, sin ti

dolor que aún, me duele todavía!

 

¡Nunca olvidaré

la maravillosa y abnegada madre

que fuiste para mi

me formaste con amor

con valores y disciplina

aunque no estemos juntos

te seguiré amando

lo que me queda de vida!

 

¡Madrecita bella

linda viejecita

recibe en tu casa eterna

un hermoso ramillete 

de flores frescas

regado con gotas de rocío

y lágrimas del alma

de tu hijo, que nunca te olvida!

 

Autor : Mauro J. Casaño

(mallito)

Lima, 01/05/2022