Poetadsym

Ella se llama poesía

Ella se llama poesía, y así he decidido bautizarla, pues, el Sol se baña entre sus cabellos con esa agua dulce que brota de su propia piel, para luego adornarla con ese brillo dorado que tanto le caracteriza.

Porque ella se llama poesía.

Y su pasado hacía mella en su piel recorriendo ese camino trazado por el tiempo, pero que solo sus recuerdos son capaces de dictarle en su mente cual si fuera ese dulce cuento de fantasía por todos soñados.

Porque ella se llama poesía.

Y quisiera que mis versos recorrieran su piel de misma forma con la que se deslizan sobre esta hoja; ahí de seguro cada rima tendrá su razón de ser cuando se pierda entre los abismos misteriosos que en ella siempre adornan.

Porque así la he decidido llamar.

Poesía

Tal como esa abrumadora fuerza de su mirada capaz de arrasar mundos enteros; volverlos rima cómo aquella de su piel; entrelazarlos en nuevos poemas de pasión y lujuria que sean capaces de hacerle el amor cada noche que los recite, porque es en ellos en donde yo me veo como poeta.

Ella se llama poesía.

Y de seguro que todos quisiéramos ser parte de su piel como lo somos de la naturaleza de esta Tierra, tan virgen como su alma, pues, es allí donde mueren los melancólicos, es allí donde se pierden los desdichados, los ausentes de aquellas caricias que sean lo suficientemente fuertes como para transformarse en nuevas rimas.

Porque ella es poesía, así, tan lujuriosa como esta nueva rima que se deja caer en su piel, abandonada por ese deseo de sentirse amada por cada rincón de sus labios de los que quisiera beber ese licor placentero como si se perdiera en cada beso suyo.

Porque ella se llama poesía.

Y quizá sea la última rima que querrá ser parte de sí misma, para luego envolverse trémula y pacientemente en su ser; traspasar su entrepierna para probar ese delirio de amor, y, finalmente, probar de sus labios esa dulce rima de su piel, cuando al final de la noche ella ya sea recitada como si fuera el más erótico poema de pasión.