Quiero contarte de las noches cuando no estás, cuando extiendo mis brazos para abrazarte y solo puedo sentir el vacío donde alguna vez yacía tu cuerpo, supongo que elegí ser asesinada por la compañía de otro corazón y está noche la soledad encontró en mi a su más fiel compañera en el umbral de un tiempo que no es el tuyo aún y no es ya el mío, quiero contarte que te recuerdo en la tranquilidad que se improvisa, en la diaria inquietud que nos acosa y en el cansancio de mi corazón, tu recuerdo es solo una resonancia entre la arquitectura de mi insomnio.